Día indie

Espero un amanecer turbio, pero no hay lagañas en mis ojos. Aún así, no veo la luz. Dando tumbos me acerco al ordenador para suplicarle un poco de música. Afuera llueve. Shuffle. Juana Molina empieza a cantar "El Perro" y por un momento siento que me la está cantando a mí, que me quiere hipnotizar nada más porque sí. Me ruedo por la cama, soy obediente y abrazo mi almohada. Ben Gibbard releva a Juana, prometiendo que me seguirá a la oscuridad mientras los Death cab for cutie me hacen pensar en alguien, sólo alguien.

Sacudido y emplazado por las circunstancias de un lunes cualquiera, salgo de casa. En el trayecto tomo mi dosis ótica de La Habitación Roja. Nos sentimos el centro del mundo, y sólo somos un cuarto oscuro. Pero quiero más. No hay nada que consiga parar el reloj; este espejo se hace viejo y me sienta... fatal. El tiro de gracia me lo da "Un día perfecto".

En la oficina me esfuerzo por canjear mi mood de siempre por otro nuevo. Le pido a Clap your hands and say yeah! alguna complacencia gentil. Mates of the States me refrescan con su "Fraud in the 80s", una canción que sigue en mi sistema. Cat Power me da un nuevo bajón. "The greatest" me cala hondo.

Quiero bailar, quiero flotar. Quiero Arctic Monkeys, quiero Belle and Sebastian. Conecto la PSP al minicomponente pero no encuentro nada, sólo a Ben Gibbard que vuelve a guiñarme el ojo y lo vuelvo a escuchar porque puedo escucharlo siempre: You remind me of home: in a suburban town with nothing to do, patiently waiting for something to happen...

Salgo a comer y la comida me sabe a arena. Regreso para escuchar el "Any day now" de Elbow, seguido del himno para la nena de diecisiete años con el que los Broken Social Scene me hacen suyo. Panic at the disco!, Phoenix, The Delays, Franz Ferdinand, Mogwai, Snow Patrol. Todos vienen a mi y se hacen otra vez mis amigos, porque uno no puede enemistarse con gente que escribe canciones tan buenas.

Ha sido un día indie, yo me siento emo y quiero merendarme a los Austin TV a cucharadas. Así la oscuridad vuelve a pintar el cielo. Es de noche. No fue un día perdido. Fue un gran día. Un día indie.

Escuchando a The Streets / Dry your eyes (canción), Never went to church (canción)