20080723

¿Quién juega el comodín?

>> No tiene superpoderes, pero irónicamente es el superhéroe más grande de todos los tiempos. Auténtico icono de la cultura de masas, Batman regresa a la pantalla grande en una película decorada con una paleta de emociones incomparable: del duelo a los aplausos, de la aventura a la tragedia, de la locura a la templanza… y del hombre a la leyenda. <<

Hace 70 años, la mente de Bob Kane dio vida a un personaje de historieta que se convertiría en un hito de la cultura pop. Batman es el héroe impasible, el más humano, un personaje que ha vivido siete décadas de constante evolución y que gracias al talento de gente como Frank Miller, Alan Moore, Tim Burton o Chris Nolan ha llegado a ser lo que es ahora: un paladín poco convencional, duro, curtido, de un heroismo atípico, mortal, profundamente atormentado y herido, un ser de atmósfera trágica suceptible a la derrota pero no a la rendición, el combatiente que no vive en un mundo lleno de colores, un guerrero de matices, un caballero obscuro… Un símbolo.

Así recibimos a nuestro Batman contemporáneo, quien tras el éxito alcanzado hace tres años con la estupenda Batman inicia (una renovación total y necesaria a la franquicia) vuelve a los cines de todo el mundo con una película todavía mejor.

En Batman: Caballero de la Noche, El Hombre Murciélago (Bale) continúa su lucha contra el crimen en Ciudad Gótica apoyándose en el Comisionado Gordon (Oldman) y el fiscal de distrito Harvey Dent (Eckhart), así como en su fiel mayordomo Alfred (Caine). Sin embargo, Batman no contaba con la aparición de un villano de locura desproporcionada e incontenible: El Guasón (Ledger). De forma casi inmediata, Batman comprende que para detener a su némesis no podrá hacer uso de sus trucos tradicionales: tendrá que cambiar sus métodos, sus armas, sus vehículos y su propia forma de entender la maldad… Todo esto mientras lidia con el triángulo que se ha formado entre Rachel (ahora interpretada por Maggie Gyllenhaal), Harvey y su verdadera identidad, Bruce Wayne. En esta batalla, todos los comodines están en mano del enemigo, y el sacrificio para poder triunfar podría ser demasiado grande.

Un filme envolvente, adictivo, de los que te engrapan al asiento a punta de emoción y drama… Un éxito de principio a fin, actuado con una puntualidad pasmosa y dirigido con soltura. O dicho de otro modo, esta es la gran película del verano. | Por Arturo Garibay.

Ledger, el gran Guasón. En los años sesenta, Cesar Romero encarnó un Guasón caricaturizado y chiflado. En 1989, Jack Nicholson recreó un Guasón sociópata y demente. Ahora, el fallecido Heath Ledger encarna un Guasón siniestro, de una perversidad casi satánica, cólerico, caprichudo, sobrecogido por su propio desequilibrio, el producto de tu peor pesadilla. El rol demandó mucho de Ledger y lo condujo a extremos histriónicos en pos de la interpretación perfecta. Y la logró. Para Nolan, se trata de una actuación “icónica”, mientras que sus compañeros de reparto y la prensa especializada ya hablan de una nominación al Oscar póstuma para Ledger, quien es la verdadera estrella del filme (y no sólo circunstancialmente).

Batman: Caballero de la Noche
(The Dark Knight)
D: Christopher Nolan.
I: Christian Bale, Michael Caine, Heath Ledger, Gary Oldman, Morgan Freeman, Aaron Eckhart, Maggie Gyllenhaal.
Acción/152 min./B-15/Estados Unidos, 2008.
FOTOGRAFÍA: WARNER BROS.
Publicada originalmente el 18 de julio de 2008 / La Buena Vida, El Informador (Guadalajara, Mx)

1 comentario:

IVONE RODRIGUEZ dijo...

Sólo hay dos actuaciones que antes de la de Ledger en Batman me impactó y me dejó muda, Una la de Marion Cotillard en La vie on rose, y otra Nicole Kidman en reencarnación.

Simplemente estremecedor. ¿Cuándo volveremos a ver actores de esa talla?

By the way, te extraño y quiero mucho :)